Introducción
La carrera de Instructor de Ski o Snowboard tiene tres etapas o niveles para alcanzar la titulación con reconocimiento de la ISIA (International Ski Instructor Association) y certificación a través de una estampilla. Desde el primer nivel estarás capacitado para estimular el aprendizaje deportivo en personas de todas las edades, y podrás también, ser reconocido tanto en los Centros de Ski de Chile como en el extranjero como un Profesional de Montaña. Todo esto se obtiene con una formación que durará tres años recibiendo conocimientos en distintas áreas tales como la técnica en la práctica deportiva tanto amateur como competitiva, psicología, pedagogía y una sólida base teórica llamada biotécnica.
El Primer Nivel es el Iniciador y capacita a los Instructores para enseñar a personas de todas edades, pero con especial énfasis en los principiantes o debutantes en el deporte blanco. Introduce al Instructor en conceptos de metodología de enseñanza, modelos de referencia entre otros. En el nivel Iniciador, el instructor es guiado en el proceso de aprender a enseñar, donde simultáneamente recibe una perfeccionamiento en su ski/snowboard personal.
El Segundo Nivel, el Auxiliar, busca potenciar las habilidades físicas en clientes con más desarrollo deportivo, donde se implementa un mayor grado de creatividad en el transcurso de la clase, para así alcanzar los objetivos propuestos. El ski/snowboard personal nuevamente recibe significativas mejoras que le permiten alcanzar al instructor un mayor control en variadas situaciones y cambios de escenarios.
El Tercer Nivel y último es el grado de Instructor Nacional. Aquí el instructor llega a su máximo desarrollo, tanto en el aspecto creativo de una clase, como de la psicopedagogía implementada para que su alumno descubra junto a las distintas combinaciones posibles para alcanzar un excelente desempeño en cualquier tipo de condición. A su vez, el Nacional es capaz de alcanzar un alto grado de desarrollo en su ski/snowboard personal, siendo capaz de demostrar la preciada fluidez que buscamos en un deportista. Esta condición se da por la alta formación en todas las áreas competentes con la especial participación del área técnica tanto en pistas, como fuera de ellas, que otorga la sólida formación chilena.
La carrera llega a su punto cúlmine con el programa de formación para Formadores de la Escuela Nacional. Este programa exige 3 años de antigüedad como nivel 3 – Grado de Nacional, plazo durante el cual debe realizar al menos 5 clínicas por año.
Una vez cumplida la antigüedad, se deben sombrear por un mínimo de dos años los procesos formativos, cumpliendo al menos 7 días en cada curso.
Durante esta última etapa, la Comisión Técnica evaluará si la persona cumple o no los requisitos para participar de los procesos formativos como Formador de la Escuela Nacional.
El grado de Instructor Nacional, título que es reconocido internacionalmente por medio de la estampilla ISIA (International Ski Instructors Asociation), institución que estandariza la enseñanza del Ski a nivel mundial a través del cumplimento de ciertas exigencias formativas dispuestas por dicha institución. La Escuela Nacional se encuentra integrada y reconocida por dicha institución como un ente formativo que certifica a instructores tanto de Ski y Snowboard con reconocimiento internacional, vale decir, que son reconocidos por las diversas Asociaciones de Instructores de Ski y Snowboard del mundo.
El interés de la Escuela Nacional en homologar la formación chilena con los estándares mundiales se confirma además con la participación en el INTERSKI que también dictamina patrones y requerimientos técnicos sobre el deporte blanco y más específicamente acerca de los Instructores de Ski.
REGLAMENTO
El Reglamento de Formación se encuentra en actualización. Este será publicado aquí próximamente.